Llegan a nuestros oídos día a día casos de malos tratos a inocentes animalitos que nos indignan por completo. Algunos son usados como si fueran objetos, de la manera más despiadada, para la propia diversión de sus dueños. ¡Son cosas que jamás las podremos entender!
Los equipos de rescate recibieron una llamada, y afortunadamente, se apresuraron para intervenir de inmediato. Simplemente no podían entender cómo alguien pudo ser tan ruin y dejarlo así, en medio de la nada.
Inmediatamente, lo tomaron en brazos y lo llevaron al veterinario para que fuera evaluado adecuadamente. Recibió un tratamiento para su infección ocular, lo alimentaron, le dieron un buen baño y sobre todo empezó a experimentar por vez primera lo que era ser acariciado y besado. Y el perrito respondía con infinita ternura a esos mimos de amor.
Pero con el tratamiento médico y una buena dosis de amor y dedicación, el cachorro comenzó a mejorar de inmediato. Empezó a resurgir un pequeño ser de luz.
Después de que el veterinario se aseguró que estaba fuera de peligro, el cachorro fue enviado a un hogar de acogida. Allí tuvo la suerte de conocer a otro perro de tamaño mucho más grande que el suyo. Su dueña de acogida, al principio pensó que a lo mejor el pequeño correría peligro, pero se equivocaba.
Ahora, con el cachorro ya sano y salvo, los rescatistas no pararán hasta descubrir quién lo abandonó de una manera tan cruel, mientras intentan encontrarle el hogar perfecto para siempre.