Las penas o dificultades que pueda presentarnos la vida se superan mucho mejor cuando lo hacemos acompañados. Y qué mejor compañía que un ser amoroso que entienda exactamente el modo en que podamos sentirnos ante las dificultades.
El perrito había sido adoptado en cuatro ocasiones pero siempre terminaba de regreso al refugio pues, las familias consideraban que su condición y las atenciones que requería el pequeño eran abrumadoras.
Bandit al igual que él estaba en silla de ruedas así que podía entender perfectamente cuales eran las necesidades de este peludito y el generoso hombre estaba dispuesto a satisfacerlas por completo.
Cuando Darrel y su esposa Sue Riderlo vieron a la criatura por primera vez en la página de Facebook de Gwinnett Jail Dogs Program se enamoraron de inmediato.
Para Darrel no había mucho qué pensar, su corazón le gritaba que hiciera lo correcto y decidió contactar al refugio en Georgia para conocer y adoptar al perrito.
Pese a que todos estaban felices de que Bandit por fin había dado con la familia correcta, muchos en el refugio extrañaron su presencia en el lugar.
Este amiguito tuvo que pasar por penosos episodios de rechazo y abandono pero ahora todo ha valido la pena. Bandit se acostumbró rápidamente a su nuevo hogar y disfruta mucho de la compañía de su papá que se ha convertido en su gran amigo y protector.