Un perrito con la mirada más desoladora de todas, tristemente fue dejado para morir con unas extrañas quemaduras que cubrían todo su cuerpo. La historia de este peludito que casi consigue su final feliz para siempre, toca la fibra más sensible de millones en las redes.
Los rescatistas lo encontraron en una esquina con la mirada más triste que puedes imaginar. Como si estuviera castigado, Lamb miró con ojos de piedad a los hombres que llegaron para ayudarlo.
Los hombres lo llevaron a clínica veterinaria donde recibió toda la atención médica que necesitaba.
Aunque el personal médico desconocía cómo causaron sus lesiones, se centraron en curar las graves heridas.
Debido a su condición, Lamb no podía estar en la perrera junto a los otros peluditos, necesitaba atención constante y un cuidado especial. Por lo que fue llevado a un hogar de acogida mientras encontraba una familia permanente.
Lamb parecía estar perdiendo la esperanza, pero con ayuda de su nueva familia de acogida logró levantar el ánimo. Sobre todo, después de que le dieron su primer juguete.
Un pequeño peluche se convirtió en su cosa favorita en todo el mundo. Lamb se aferraba a él como si de eso dependiera su vida. No lo soltaba por nada y siempre lo tenía cerca a la hora de dormir.
Aunque todo parecía ir de maravilla, y por primera vez Lamb comenzaba a disfrutar lo que significaba ser acariciado, y de su propia camita, contar con verdaderos hermanos para el juego y las travesuras, y tener a quien llamar papá y mamá, todo dio un giro inesperado.