Esperando clemencia: el perro callejero se agazapó contra la pared, esperando encontrar restos de comida del supermercado

Perro espera frente al supermercado a que alguien le dé algo de comida

Cane aspetta davanti al supermercato qualcuno che gli dia del cibo

Los animales callejeros tienen que valerse por sí mismos si quieren sobrevivir, ya que no tienen a nadie que los cuide. Cada uno adopta la estrategia que considera más adecuada. Por ejemplo, este perro callejero ha localizado un supermercado, por lo que se para en la entrada y espera a que alguien le arroje las sobras.Perro espera frente al supermercado a que alguien le dé algo de comidaUn perro muy delgado se sienta frente a un supermercado, esperando conseguir algo de comer

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Sucede en Rusia, donde una asociación que se ocupa de la recuperación de animales callejeros, Angel Sobaki Help, recupera un pequeño perro en pésimas condiciones. Un día, una voluntaria estaba comprando en este supermercado cuando al salir se encontró con este simpático animal a su izquierda. El pequeño apenas podía mantenerse en pie, ayudándose apoyándose contra la pared.

Estaba muy delgado, casi caquéctico. Su pelaje carecía de pelo en varias zonas, probablemente padeciendo sarna. También tenía inflamación en los ojos y le salía material purulento de los oídos. Estaba claro que este perro necesitaba ayuda, de lo contrario no habría sobrevivido mucho más. Entonces la mujer lo tomó y lo metió en el auto. El amigo de cuatro patas no le tenía miedo al hombre, de hecho no tuvo muchas dificultades para atraparlo.

Antes de ser llevado al refugio, el perro fue examinado por el médico veterinario, quien le recetó todos los tratamientos adecuados. La recuperación del animal fue asombrosa. La transformación se produjo en sólo 9 días. Parecía un perro diferente, había vuelto a ganar peso. Ahora pesaba 31 kg y parecía cada vez más un perro pastor. En el refugio todos los empleados se enamoraron de él y lo cuidaron con mucho amor. El perrito se llamó Baikal y se convirtió en un perrito juguetón y muy sociable. Ahora Baikal está bien y le gustaría encontrar una familia permanente que lo adopte y nunca más lo abandone.