Aunque la maternidad en un instinto arraigado en muchas criaturas, también existen otras a los que parece la naturaleza no dotó con tal llamado.
Se trata del amable y dulce Peabody, el poni más pequeño de la nueva camada que tuvo su madre en el criadero Rucker Creek, de San Diego en Estados Unidos.
El pobre era incluso más pequeño que otros caballos miniatura y esa anomalía fue detectada por su madre biológica al instante.
Por cosas de la naturaleza, aún incomprensibles para nosotros, la poni decidió dejar al pobre Peabody de lado. Lo bueno es que él no estaba del todo solo, pues a su alrededor había gente dispuesta a ayudarlo.
“Peabody es el caballo más pequeño del mundo a su edad. Los caballos nunca son animales de interior, pero Peabody es tan pequeño que nunca podría vivir fuera a menos que crezca, y no estamos seguros de que lo haga. En la actualidad, vive dentro de la casa con los perros”, dijo Faith Smith.
Ahora que cuenta con un techito y una familia, la vida de este pequeño huérfano cambió para siempre. Peabody comparte no solo con humanos, sino con unos peludos que se han hecho sus hermanos.
Para la animalista es un honor contar con el pequeño poni en su hogar y está dispuesta a tenerlo para toda la vida. No obstante, espera que la criatura logre crecer algún día y desarrollarse a un tamaño normal.