Las calles no son un buen lugar para ninguna mascota. Allí no solo hay personas crueles u otros animales que luchan por un poco de comida o territorio dispuestos a enfrentarse a otros con el único fin de sobrevivir. También hay lugares peligrosos, como las carreteras o las autopistas.
¿Cuántos perritos han perdido a su madre o a alguno de sus hermanitos simplemente porque alguno de ellos ha sido lastimado por un vehículo al atreverse a cruzar una carretera o una autopista?
La pequeña cachorra solo podía sentarse a su lado y esperar, sin saber lo que estaba pasando.
En su inocencia, tal y como le ocurre a muchos otros perros, quizás esperaba ver a su madre ponerse de pie de un momento a otro, pero ese instante jamás llegaría.
Afortunadamente, un transeúnte vio esto y se detuvo para pedir ayuda. La organización de rescate acogió tanto a la madre como a la cachorrita con el corazón roto.
Estaba completamente cerrada. Le darían a la mamá un entierro adecuado y atenderían a la pequeñita, que era quien más los necesitaba. Había que darle tiempo para que sanara las heridas de su corazón por haber vivido un momento tan traumático.
Al principio pensaron que la chiquitita no lo lograría, tan deprimida como estaba, pero ellos no estaban dispuestos a rendirse y se tomaron muy en serio el compromiso de impulsarla hacia su bienestar y devolverle la ilusión por vivir.
El personal del rescate trabaja de un modo constante para mantenerla con vida, mientras la perrita paulatinamente se va reponiendo.
Aún es muy pronto para superar la dolorosa pérdida de la madre, pero no dudamos que con todo el amor que está recibiendo, definitivamente lo logre…
Los perritos que sobreviven en la calle, lamentablemente están expuestos a muchos peligros. Es importante que creemos conciencia sobre la importancia de ayudarlos. Rescatar y adoptar siempre será la mejor opción.