“A veces no es la medicina la que hace el truco. Son horas de trabajo, una pizca de suerte, mezclada con amor”, escribe Animal Aid Unlimited. Están hablando del rescate de Pequeña Suri, una cabrita que estaba cubierta de pies a cabeza en asfalto endurecido.
Suri fue cruelmente abandonada por su dueño y dejada para morir. Afortunadamente, alguien la encontró y la llevó al refugio de animales en India para salvar su vida. La pequeña cabra estaba sobrecalentada, deshidratada y casi inconsciente cuando llegó por primera vez, y salvarla “tomó 10 manos amorosas trabajando durante horas”.
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El alquitrán cubría cada centímetro del cuerpo de Suri. Sus patas estaban pegadas y su cola estaba pegada a sus muslos. Lo único que podía mover eran sus ojos y, afortunadamente, su boca, para que pudieran administrarle líquidos.
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Animal Aid Unlimited dice que su experiencia en limpiar cachorros atrapados en alquitrán les hizo saber que tomaría horas ablandar el alquitrán tóxico usando aceite vegetal y jabón para derretirlo. ¡Pero para Suri tomó tres días de limpieza para deshacerse de la pegajosa sustancia negra!
“Cuando Suri fue finalmente liberada del agarre del alquitrán, casi saltó de alegría. Y nosotros también”, escriben los rescatistas.
Afortunadamente, Suri tiene un nuevo hogar en un santuario de animales donde puede vivir el resto de sus días sin preocupaciones.
