Este pobre perro llevaba demasiado tiempo en apuros y se desplomó en el jardín de alguien. Llamaron a los rescatistas para asegurarse de que seguía con vida, y usó todas sus fuerzas para levantar la cabeza. Si hubieran esperado más, probablemente no habría sobrevivido.
Llevaron a Jake al veterinario de inmediato, donde recibió todos los cuidados necesarios y fue mimado por el personal. No abrió los ojos en una semana entera, ¡y finalmente mostró esas bellezas! Y cuando llegó el día de su adopción, lucía de maravilla. 🙂
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