Una mujer se llena de tristeza al ver a un perro solitario atado a una jaula.

En un mundo donde los perros sueñan con amor y cariño infinitos, muchos, por desgracia, se encuentran abandonados y anhelan un hogar propio. Esta fue la cruda realidad de un perro llamado Explorer, quien fue encontrado atado a una jaula, sentado desanimado en el césped a la entrada de un parque.

Explorer estaba visiblemente angustiado; sus ojos reflejaban una profunda tristeza mientras ladraba a la defensiva a cualquiera que pasara. Maki comprendió que sus ladridos no eran señales de agresión, sino una desesperada súplica de seguridad en su estado vulnerable.

Con la misión de encontrarle un hogar estable, Maki contactó con Schnauzer Rescue of Texas. Al día siguiente, lo llevó al veterinario del refugio, donde Explorer recibió sus vacunas y pronto fue trasladado a un hogar de acogida en Woodlands, Texas. Allí, recibió el cariño que tanto anhelaba.