General fue encontrado tendido dolorido al borde del camino, incapaz de mover las patas traseras. Un transeúnte bondadoso le dio comida y agua para que se mantuviera, pero sabiendo que necesitaba más ayuda, llamaron a un rescatista.

Cuando llegó la rescatista, encontró a General debajo de una caja para protegerlo del sol. Con solo 1,6 kg de peso, estaba desnutrido y gravemente herido. Sin dudarlo, lo llevó de urgencia a una clínica veterinaria para que recibiera atención inmediata.
El veterinario determinó que General tenía la columna rota y requería cirugía urgente. A pesar de los riesgos, el procedimiento salió bien y General comenzó su lenta recuperación. Durante los siguientes 18 días, se sometió a tratamientos adicionales y a una segunda cirugía.

Aunque el camino hacia la recuperación fue difícil, la resiliencia y el espíritu brillante del General brillaron. Su determinación inquebrantable inspiró a todos a su alrededor, demostrando que su nombre, General, era bien merecido.
Un nuevo comienzo
Tras recibir el alta hospitalaria, General fue trasladado a un hogar de acogida donde estuvo rodeado de amor y cuidados. No tardó mucho en que una familia se enamorara de él y lo adoptara, dándole el hogar definitivo que merecía.

A pesar de su discapacidad, la nueva familia de General lo adoraba. Rápidamente estableció un vínculo con sus hermanos caninos y contagió su positivismo contagioso. Su familia estaba decidida a brindarle la mejor calidad de vida, incluyendo explorar opciones terapéuticas para ayudarlo a caminar de nuevo.
Abrazando la vida de una manera nueva

Aunque los intentos de terapia con células madre no tuvieron éxito, el espíritu indomable del General nunca flaqueó. Su familia le proporcionó una silla de ruedas para perros, lo que le permitió moverse con independencia y disfrutar plenamente de la vida.

Con sus nuevas ruedas, General podía correr, jugar y explorar como cualquier otro perro. Su alegría se hacía evidente en cada movimiento de cola, demostrando que una limitación física jamás podría mermar su entusiasmo por la vida.
Un espíritu imparable

La historia de General es un testimonio de la resiliencia de los animales y del impacto de la compasión humana. A pesar de haber sido abandonado, sufrir un dolor inimaginable y enfrentar una parálisis permanente, General se ha convertido en un símbolo de esperanza y determinación.

Su trayectoria nos recuerda que con amor, cariño y espíritu de lucha, incluso las circunstancias más difíciles pueden llevar a una vida llena de felicidad y propósito. General no solo sobrevive, sino que prospera, demostrando que vale la pena salvar cada vida.
