La indiferencia es el peor mal de la sociedad actual. No solo hacia las personas, sino también hacia los animales que necesitan atención urgente. Ver a una perra vagando por la calle con una masa enorme bajo la barriga debería impactar a todos y, al menos, denunciar el caso a los centros competentes. Y, en cambio, Natalie llevaba con esta carga quién sabe cuánto tiempo.
Esta perrita callejera llamada Natalie fue vista con otros perros callejeros. Pero había algo inquietante en ella. Justo debajo de su vientre tenía una masa gigantesca y sospechosa. Natalie necesitaba tratamiento urgente.
La perra tenía mucho miedo. En cuanto alguien se acercaba, se alejaba. Se desconoce su pasado, pero verla tan asustada afectó a todos los que estaban allí para ayudarla. Por fin, había llegado su momento de recibir ayuda y los cuidados adecuados. Ya no sufriría.
Al llegar a la clínica veterinaria, los médicos examinaron a Natalie de inmediato y descubrieron que la perra tenía una hernia. Inmediatamente prepararon la mesa para operarla.
La cirugía fue un éxito y le extirparon la hernia por completo. Los veterinarios también esterilizaron a Natalie para asegurar su bienestar futuro.
Un video compartido en YouTube capturó los distintos momentos que retrataron a la perra, desde cuando deambulaba por las calles del pueblo hasta cuando personas bondadosas la recuperaron. Su transformación es una clara muestra de todo el trabajo que los rescatistas han realizado para ayudarla.
Ahora por fin puede vivir feliz sin ese enorme bulto que llevaba encima. Solo a través del amor y la compasión vivimos mejor, humanos y animales. Con el tiempo y los cuidados adecuados, Natalie se habría recuperado por completo.
