Enterarse de que un ser querido tiene cáncer no es un trago fácil de digerir para nadie. Precisamente este calvario lo está viviendo, Angie Daron, una venezolana que se niega a dejar morir a la criatura que más ama en este mundo: su perrito Kaiser.
Este amiguito es un bóxer de un año y siete meses con un futuro incierto, pero con un gran corazón, que en poco tiempo supo cómo ganarse el cariño de su dueña y toda la familia. Juntos iniciaron una campaña en redes para costear su tratamiento y aferrarlo a la vida.
Kaiser vive con su mami en Caracas y decidieron vender galletas en aras de recaudar el dinero necesario para costear las tres operaciones que podrían salvarle la vida a este peludo.
«Mi mamá humana y yo estamos vendiendo unas ricas galleticas para poder cubrir los gastos de las tres operaciones que me tienen que realizar, las cuales son: castración, uretrotomía y amputación del miembro», escribe Angie Daron en Instagram.
El perrito fue diagnosticado con un tumor venéreo a mediados de agosto y a partir de allí inició la carrera contra el tiempo para salvarle la vida.
“Todo fue muy rápido. Ya no era el perrito juguetón, le dolía caminar y estaba triste. Sus valores bajaron considerablemente. Fue reanimándose con vitaminas, medicamentos y líquidos para subirle sus defensas. Días después, se le cayó parte de su genital”, recordó Angie.
Tras el diagnóstico, la familia estaba preocupada por los recursos para costear las operaciones y tratamiento de Kaiser, pero un amigo de su dueña tuvo una excelente idea. Iniciaron una campaña en redes para promocionar galletitas que ayudarían a cubrir los gastos médicos del peludo.
La primera fotografía de la campaña muestra a Kaiser con un cartelito ofreciendo los productos que con amor hace su mamá. De inmediato, la publicación se hizo viral y decenas de personas se unieron a la causa.
Con el dinero recaudado Kaiser inició sus quimioterapias pero las cirugías son necesarias para erradicar el cáncer que ya ha invadido todo su aparato reproductor.
La pandemia y la crisis humanitaria que atraviesa el país suramericano dejaban cuesta arriba la lucha de esta familia, pero pese a todo, Angie recibió muchas las donaciones y mensajes de solidaridad.
“Las personas que me han escrito, lo hacen dándole gestos de amor a Kaiser y ya tiene más amiguitos. Las buenas vibras me han llenado de ganas para seguir luchando por él”, dijo la dueña.
Hace una semana, Angie compartió en sus redes la mejor noticia de todas: Kaiser fue operado y ahora comienza un necesario proceso de recuperación