Agonizaba en el barro, sin fuerzas, hasta que un ángel lo encontró y, con amor, le devolvió la vid

En ocasiones las personas se cohíben de ayudar por creer que esto les conllevará a una gran responsabilidad, sin imaginarse lo gratificante que les puede resultar hacer el bien.

Ante la lamentable escena, Jaime no pudo pasar de largo y dejó de lado todas sus dudas para abalanzarse a hacer el bien. Era evidente que el can necesitaba que lo socorriera y parecía que nadie tenía la intención de hacerlo.

Jorge Jaime se acercó cauteloso al peludo no fuese a resultar un can agresivo, pero todo lo contrario pues apenas vio al hombre el perro comenzó a aullar. Era como si el mestizo le suplicase ayuda.

Jorge lo tomó entre sus brazos y llevó al mestizo hasta su nuevo hogar. Una vez en casa, el can recibió un bañito dentro en una especie de piscina para sacar toda la suciedad de su cuerpo.

Además de eso, Jorge lo alimentó y se aseguró de que no tuviese ninguna lesión externa que ameritara mayores cuidados.

Por fortuna, en can se encontraba en buena condición de salud. Su mayor mal era la desnutrición y cansancio que cargaba sobre su espalda.

Después de un año de haber ocurrido este rescate, el buen hombre decidió compartir su experiencia a través del grupo de Facebook Huellitas de amor. Jorge publicó una serie de fotografías que tituló “El amor todo lo puede”.

El cambio que mostró el peludo es sorprendente y sin duda todo es gracias al cariño y los cuidados de Jorge.