Los rescatistas de Hope For Paws recibieron una llamada sobre un perro que estaba en evidente angustia. Con la poca energía que tenía, entró en el patio de una familia y allí se derrumbó.
Por suerte para el perrito, la mujer que habitaba esa casa era una persona de gran corazón y supo que tenía que solicitar la ayuda adecuada. Eldad y Loreta acudieron rápidamente al llamado para salvar a este chiquillo.
La pata del perro estaba hinchada y no podía soportar su propio peso. Desde lejos, Eldad y Loreta pudieron ver cuánto había luchado el perro por sobrevivir. ¡Estaba completamente exhausto, adolorido y necesitaba ser rescatado!
El hombro de Milo fue tratado cuanto antes. Toda la materia infecciosa que se encontraba depositada en su hombro fue removida, para luego comenzar con un tratamiento a base de antibióticos.
A pesar de tener la patita enyesada, muy pronto Milo comenzó a demostrar que no solo era muy amoroso, también era sumamente juguetón. Saberse saludable le dio fuerzas para demostrar la confianza y el afecto que sentía por las personas que lo habían salvado.
A pesar de que aún hay mucha desidia e indiferencia, todavía hay personas amables, y el caso de Milo es prueba de ello. ¡Compártelo con tus amigos!